Quién puede decir qué es y qué no es real? El dolor es real? Es real la tristeza? Es real la angustia? Es real el sufrimiento? Lo único que nos hace saber que algo es real es sentirlo. Cuando te sientes vivo, sabes que es la realidad. Pero cuando te mienten, también es real. Podría ser la realidad una gran mentira? No soy el primero que se pregunta si todo lo que vivimos es real. Cada uno tiene sus propias ideas sobre la realidad. Mi definición de realidad es “El conjunto de cosas presentes a nuestro alrededor que nos hacen sentir algo”. Ya que los sueños me hacen sentir algo, los sueños son reales para mí. A veces la realidad es demasiado cruda, y pensamos que ojalá no fuese verdad. Quizá no es real, y estemos sufriendo sin necesidad, pero eso no llegaremos a saberlo nunca.
Kitsunedomingo, 25 de mayo de 2008
lunes, 19 de mayo de 2008
Alma
En el momento en que el crepúsculo anunció la llegada inminente de la noche, el Sol se ocultó. En ese mismo momento, una alma en pena, ya caída en el Olvido, regresaba al mundo material despertando de su ensueño. Atrapada en un palacio de cristal, resquebrajó las paredes de la agonía que la retenían y la cortaban, escapando de su prisión de vidrio. Fue entonces cuando logró encontrarse a si misma, y el lugar que debía ocupar en el cosmos. Fue entonces cuando halló la paz del silencio, la harmonía de la noche. Entonces fue cuando se desnudó y dejó mostrar lo que de verdad encerraba en su interior, atada con las cadenas y los candados del sufrimiento.
miércoles, 14 de mayo de 2008
Utopía
Cuantas cosas nos proponemos hacer en esta vida? Y por qué cumplimos tan pocas? Muchas veces tenemos pensamientos utópicos. Creemos que podemos cambiar el mundo, que podemos hacer lo que sea. Pero entonces nos fallan las fuerzas, y nos damos cuenta de que solo es una utopía. En si, la vida es una utopía. Qué pretendes conseguir viviendo? Y qué es lo que te hace sentirte vivo, y lo que te empuja a seguir adelante? La vida es una maldita utopía. Sé que mis esfuerzos, al fin y al cabo, cuando me muera habrán sido en vano, así que, qué mas dará? Por eso yo he elegido tirar la toalla, y coger el camino fácil.
Echaré de menos PK2.
Kitsune
martes, 6 de mayo de 2008
Vida
Un buen día, mis padres decidieron tener un hijo. Si no lo hubiesen conseguido yo no estaría aquí, escribiendo estas líneas. Un día 5 de Enero como cualquier otro me dio por salir. Debía de estar cansado de esperar, por que salí un mes antes de la cuenta. Desde entonces, desde aquel lejano año '92, las cosas han ido de mal en peor. Si ya es el colmo nacer, imagínate lo de vivir. En este mundo hay que sobrevivir lo mejor que uno sabe, por que está lleno de depredadores en forma de mala gente y de accidentes del terreno en forma de problemas. Entonces yo me pregunto; ¿La Vida es un regalo o un castigo? La gracia está en que es una mezcla de las dos cosas, aunque mayormente es un castigo. De todas formas, pasamos los buenos momentos felices, y en los malos aguantamos la tormenta como podemos.
Kitsune
domingo, 4 de mayo de 2008
Tiempo
Las olas chocaban contra las rocas. El agua provocaba un susurro agradable para los oídos que se rompía con el choque de cada ola contra la roca en un ciclo infinito. La noche, negra como el azabache se extendía antes mis ojos, mientras observaba el mar desde el mirador, sobre la playa. Un barco a lo lejos parpadeaba con luces tenues, como queriendo llamar la atención. El faro lanzaba destellos cíclicos cada pocos segundos. En un restaurante cercano al mirador sonaba música alegre, y en sus entrañas las mujeres bailaban, los hombres bebían y fumaban, y los niños correteaban de un lado para otro, jugueteando entre ellos. La noche era apacible, la más apacible que había pasado en mucho, mucho tiempo. Me entraron ganas de bajar a la playa. Cuando bajé me quité los zapatos. Me gustaba sentir la arena bajo mis pies, entre los dedos. Me hacia sentirme más unido al mundo. Me senté en la arena, lo suficientemente cerca del agua como para que en cada ola me tocara los pies. Cogí un puñado de arena y lo dejé escapar entre mis dedos, como si del tiempo se tratase. Como si fuese la arena en mi mano, el tiempo se deslizó, y me pasé la noche en la playa observando el mar y las estrellas.
Kitsune